Mi estancia en Irene Maisonettes fue maravillosa. Me quedé en este acogedor apartamento durante una semana mientras visitaba Chania. El personal fue extremadamente amable y servicial, brindándome recomendaciones sobre lugares para visitar y ayudándome con el alquiler de coche. El apartamento en sí era increíblemente acogedor, con todas las comodidades necesarias para una estancia confortable. Incluso había café, pan tostado y galletas para el desayuno, así como un regalo de bienvenida con productos típicos de la zona. Estaba perfectamente ubicado, a solo unos pasos de la estación de autobuses, del casco antiguo y también muy cerca de la playa.

Un alojamiento tradicional con WiFi gratis. La ubicación es de primera y cómoda, a poca distancia de Public. La zona es peatonal, está en las proximidades de restaurantes y tiendas, del antiguo centro, de todas las atracciones principales. Me encantaría volver, todo fue alucinante aquí...

un apartamento súper cómodo e impecable, se encontraba muy cerca de la estación central de autobuses, del antiguo puerto. un registro sin problemas. una ubicación bonita, a 5 minutos a pie de parking.

Apartamento amplio y bien equipado, con todo lo necesario. Limpieza impecable en todas las áreas.- Ubicación ideal, en una zona tranquila pero cerca del centro de la ciudad.- Parking privado y cerrado disponible.- El personal es amable y atento.

No hay aspectos negativos.

si te toca la habitacion de la calle hay mucho ruido y no se puede dormir. pedir habitacion interior

La casa era mega guay, con tele en pantalla plana y Wi-Fi para estar siempre conectados. Visitamos la playa y el casco antiguo de La Canea, todo super cerca y lleno de marcha. Además, los anfitriones nos mimaron con regalos y detalles increíbles. ¡Nos sentimos como auténticas estrellas de rock!

Si tuviéramos que pedir algo más, nos hubiera encantado tener una sala de juegos con futbolín o billar. Nos gusta la fiesta y el planeta Irene Maisonettes tenía todo menos eso.

Muy bien ubicado. Y el personal muy amable. El Sr. Michalis nos ayudó muchísimo con los problemas que fueron surgiendo con motivo de las huelgas en Grecia. No hay palabras para agradecerle.Muy recomendable.

¡Increíble alojamiento! Limpieza impecable, dúplex de madera precioso, anfitrión detallista. Cesta con deliciosos alimentos, ubicación ideal cerca de todo.

El personal es excelente. Muy atento y muy amables. El sitio es inmejorable y tiene parking propio. El precio es bonísimo.

Siempre vuelvo a este hotel en La Canea porque el personal es amable y me ayudó a encontrar lo que perdí la primera vez. Tiene Wi-Fi, hervidor eléctrico, utensilios de cocina, aire acondicionado, TV de pantalla plana, check-in / check-out VIP. Regresaré para Pascua.

Mihail, el dueño, es muy amable y servicial, si no está en la recepción, hay que llamarle al móvil. Nos ayudó con todo lo que pudo y hasta se interesó por la salud de mi acompañante horas después de enterarse de que se sentía mal (nos buscó la farmacia abierta y el teléfono de la compañía aérea). Habitación con dos pisos, daba directamente a la calle por lo que era un poco oscura (una cortina en la puerta daba intimidad al interior). En la planta alta está la cocina con nevera, microondas, kettle, vajilla etc. Hay aparcamiento para el coche (gratuito) que viene muy bien porque la ciudad está atestada de vehículos. Da a la calle principal justo a la entrada de la ciudad vieja (5 minutos andando para entrar en la zona peatonal). La calle tiene mucho tráfico así que, para evitar ruidos, conviene cerrar la ventana (hay aire acondicionado y calefacción). Muy limpio. Calidad/precio buena, no tiene servicio de desayuno pero hay un cestillo con café, tostadas, mermelada...

Este hotel está súper cerca del centro y tiene todo lo que necesitas. La habitación es un dúplex con una cocina completa en la planta baja, y arriba hay dos camas grandes y una tele. Además, te dejan una bandeja con cosas para desayunar. ¡Nos regalaron imanes de la nevera típicos de Grecia al irnos!

La única pega es que no hay muchas opciones de diversión nocturna para jóvenes fiesteros.

El hotel Irene Maisonettes es muy limpio y se encuentra en una zona tranquila. Está ubicado en una calle principal, cerca de la ciudad vieja, lo que facilita el acceso a la zona peatonal. El dueño, Mihail, es amable y servicial, y se preocupa por la comodidad de los huéspedes. Además, el aparcamiento gratuito es muy conveniente en una ciudad con mucho tráfico.

Recomendaría este lugar.

¡Increíble! La amabilidad y hospitalidad del personal fue alucinante. Nos hicieron sentir como en casa, dándonos consejos para visitar lugares y ofreciéndonos detalles de bienvenida y despedida. La ubicación era perfecta, cercana a la estación de autobuses, la playa y el casco histórico. Las habitaciones eran espaciosas y contaban con todas las comodidades, incluyendo una cocina completa. ¡Muy recomendable!

Una de las características destacadas fue la base de datos proporcionada, muy útil para un viajero frecuente como yo. Pude acceder rápidamente a información sobre servicios, precios y disponibilidad. Además, la habitación con balcón era simplemente encantadora. Disfruté de las vistas al mar y de la brisa fresca mientras tomaba mi café por la mañana.

Hubo un pequeño inconveniente durante mi estancia. Parece que tuvieron un pequeño lío con el tema del pago.